miércoles, 24 de agosto de 2011

Encanto del amor.

Dime cosas bonitas al oído, para hacerme saber que de ti estoy enamorada.
Susúrrame aquellos versos olvidados, aquellos que aún guardan ese olor a perfume de amor.
Cántame esa canción que nos llevó lejos, a aquel jardín desierto, donde juntos rodamos por el césped y nos perdimos en la inmensa naturaleza.
Recuérdame los momentos de pasión guardados en alma, en mi ser, en cada uno de mis sentidos, en cada rincón de mi piel, y en cada fragmento del gran amor que unidos hemos recoletado.
Abrázame en cada momento en el que la soledad me abrume y que mi mente te recuerde como lo más bello que ha pasado por mi vida.
Siénteme en el viento, y entre los arbustos de este bosque perdido, en este bosque encantado de pasiones y sentimientos arrebatados.
Hiéreme, acaríciame después, bésame como si fuera la última vez, arrástrame lejos, muy lejos, donde nadie nos vea, donde nadie de cerca pueda sentir nuestros latidos en el aroma confuso y apasionado de la locura.
Enamórame cada segundo de tu vida. Ámame a cada instante. Acércame a tu pecho y hazme allí un hogar. Acógeme en tus brazos y húndeme en tu corazón, donde mi alma quede guardada por siempre en tu mirada.
Guárdame en el silencio, para que pueda gritar eternamente al cielo mi inmenso amor, mis intensas e irremediables ganas de vivir, siempre a tu lado, siempre con la suerte posada en las yemas de mis dedos. Con la suerte que es el privilegio de amar, y de ser amado. Como tú, y como yo.
Como encanto del amor.

No hay comentarios:

Publicar un comentario